Que la vida está llena de altibajos es algo que todos sabemos. No importa quién seas, cuánto dinero tengas, o en qué zona del mundo estés; hay que tener una actitud ante la vida.
Aunque rara vez se admite, el mundo, según se lo ve no es nada más que un espejo en el cual se refleja el estado interior. Que la vida esté llena de altibajos es algo que todos saben.
No importa quién seas, cuánto dinero tengas, o en qué zona del mundo estés; vivir experiencias y situaciones desagradables a cualquiera le puede pasar. Así que tomar una actitud positiva frente al mundo, nos hará más felices y hará que los demás sean felices también.
Precisamente de eso se trata esta fábula, las enseñanzas de un indio nativoamericano que muestra como la batalla interior puede dar como resultado qué lobo será el que gane, dependiendo del lobo que se decida alimentar.
Un anciano Cherokee contaba a su nieto acerca acerca de una batalla que ocurre en el interior de las personas. Ésta era entre dos lobos…
Uno de ellos es de color negro: representa la envidia, aflicción, codicia, arrogancia, resentimiento hacia mí mismo, siente lástima hacia mí, actúa desde la culpabilidad, tiene un fuerte complejo de inferioridad, miente, es orgulloso, falso y su ego no posee límite.
El otro es de color blanco: representa la alegría, me ayuda a alcanzar la paz conmigo mismo, su amor es incondicional hacia los demás, actúa desde la esperanza con serenidad, humildad, bondad y benevolencia, demuestra constante empatía, generosidad, compasión y fe.
El nieto pensó sobre eso durante un largo minuto, y entonces le preguntó: “¿Qué lobo ganará?”
“Aquel al que tú alimentes”, le respondió el anciano.
Y el nieto, volvió a preguntar: “¿Y como sabré a cuál de los dos estoy alimentando más?
El indio le responde: “A través de las actitudes que tu tomes, sabrás a cuál de los dos estas alimentando más. El mal nunca gana al bien, a menos que lo alimentes”.
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Moraleja
Nuestra manera de pensar y decidir provoca sentimientos y actitudes similares a la gente de nuestro entrono. Así que el reto en la vida debe consistir en decidir qué actitud tomar para relacionarnos con los demás, para vivir a plenitud.
Si se decide vivir con pasión, alegría, optimismo, ilusión, no solamente nos beneficiaremos, sino que todos aquellos que nos rodean se dejarán arrastrar por una vida más intensa y productiva.
Se trata de elegir durante todos los días de la vida y tener que renunciar a todo aquello que no se elige. Siempre tenemos que enfrentarnos a dos alternativas igualmente interesantes a la hora de escoger. Así que dependiendo de nuestras decisiones y de nuestra actitud positiva: “así será nuestra vida”.
Vía: lamenteesmaravillosa.com